lunes, 21 de diciembre de 2015

Rescatando poemas de lluvia 2


Digo que  corro por no mojarme

pero es mentira.

Las palabras que pasean 
como hormigas por mi vientre
me ahogan y me vuelven incómoda,
extraña.

Y me miro de los pies al pecho
por si algún signo me delatara.

               El temblor es imperceptible
interno como un pasado oculto,
como las arterias de los ojos.

Y corro,
               y digo que corro por no mojarme.

Otra vez la lluvia
pidiéndome adentros,

como si yo pudiera entrar en mí
cada vez que ella me llueve.

domingo, 13 de diciembre de 2015

Rescatando poemas de lluvia

Hay días que son de lluvia
y en ella te recreas.
Acabas de su mismo color
como si quisieras fundirte
y provocar equívocos
en aquellas palabras
que en algún tiempo
nos estallaron en la boca.
Siempre fueron caprichosas
las palabras que nos mojaron,
y el agua que te rodeaba
aquellos días.
La lluvia se ha convertido hoy
en un halo incoloro que me perturba
Por eso escribo
y me detengo en lo que
haría si no colocara las sílabas
de esta forma tan dúctil
tan semejante a la respiración
cuando dormimos y no sabemos
que la muerte se esconde
en un sueño y que la noche
se afila en el acento

de un ángel insuficiente.